Gaia y Urano

 

TODO ORDEN UNIVERSAL PROVIENE DEL CAOS

En todas las historias de la creación es el CAOS el que inicialmente reina... La Biblia dice: "La tierra estaba sin forma y desierta, y las tinieblas cubrían el caos"... El Caos es YIN, sin él no habría ímpetu al orden Yang. Así del Caos, ser impersonal desprovisto de inteligencia que encarna el desorden absoluto e indistinto, emerge la primera creatura: Eros "que rompe los miembros" (Eros entendido como fuerza espiritual pensante y no como el apasionado volitivo que tira flechas del amor), la pulsión generadora, que estimula al Caos para generar a su vez otros dioses. Así que no te sorprendas si Eros, es decir el Amor, surge siempre del Caos, de la locura, de lo irracional, es la pulsión creadora IMPERSONAL que hace que todo se vuelva personal, es la fuerza irracional que da sentido y razón a todo, el amor es la única cosa sin sentido que da sentido a toda realidad, es del caos que nacen los dioses y el amor. El amor como el caos son instintos, pasiones, fuerzas que inicialmente no son ni positivas ni negativas, depende de nosotros dirigirlas hacia las polaridades correctas y mantenerlas en equilibrio, son los dos primeros poderes energéticos (yin-yang) de todo ser en la creación posee y de los cuales somos poseídos. Del Caos y Eros surge la Diosa Gaia: La Madre Tierra.

EN EL PRINCIPIO EXISTÍA EL CIELO (URANO) Y LA TIERRA (GAIA)

Urano en griego Οὐρανός "Ouranós", significa "cielo estrellado, firmamento". Así sucedió en Mesopotamia con el dios que los acadios llamaron Anu y los sumerios An, que es el Cielo, que reina sobre el Mundo Superior, lo mismo que los griegos con Urano. La mentalidad patriarcal reinante en la época veía en Urano al Padre, la personificación del Cielo como elemento fecundo. Por lo tanto, gobernaba lo desconocido, que es EL CIELO, lo espiritual, pero de manera racional (por eso predominaba el poder de la filosofía y no de la psicología, como hoy el de la ciencia y no el de la espiritualidad). ¿Pero este Padre por quién fue creado? Urano no era más que el nombre masculino de la Diosa orgiástica UR-ANA "reina de las montañas y los vientos", la Madre Tierra: Gaia. De hecho fue la Tierra la que dio a luz al Cielo: "La Madre Tierra emergió del Caos y dio a luz a su hijo Urano mientras dormía". Este sueño de parto es nuestra dimensión espiritual donde creamos la dimensión trascendental más allá de la materia, al igual que Eva fue creada mientras Adán dormía. Solo los egipcios en la antigüedad tenían una idea femenina del cielo, la diosa Nut, mientras que su hermano y esposo Geb representa el continente. Gaia sola genera a Urano sin unirse a nadie (¿no les dice nada esta imagen de la Virgen que da a luz a Jesús sin intervención humana?). ¡Nadie puede salvarte, tienes que hacerlo tú mismo! Debes ser tú mismo sin la intervención de nadie más y sin tener que ser como otro. Nadie más podrá entrar en lo más profundo de tu ser o consciencia (Útero), debes regenerarte (dar a luz) con tu consciencia al descubrir esta verdad: la unión entre Urano y Gaia (espíritu y materia, alma y cuerpo) yin y yang.

DIOS URANO FECUNDA A SU MADRE GAIA

Os parecerá extraño, pero desde que existe el mundo uno de los tabúes más antiguos y divinos es el incesto, se repite incluso en el cristianismo: Dios Padre engendró a Jesús de su Madre María (Jesús siendo el mismo Dios se engendró solo como Urano de su madre) o por su hija María como criatura. En tal caso es igualmente incesto: el Dios Padre se une con su hija Maria como creatura. ¿Qué significa todo este arquetipo incestuoso? A nivel psicoanalítico el significado es muy simple y sencillo: Para regenerarnos en el espíritu cada uno de nosotros debe autoafirmarse, consentir consigo mismo y esto se hace solo con la propia conciencia y AUTOconvicción; nosotros en el espíritu no podemos darnos vida si no somos SI MISMOS, y para serlo debemos amarnos, aceptarnos, acogernos, perdonarnos, comprendernos y todo SOLO consigo mismos, en sì mismos, por sì mismos... nuestra tendencia INNATA al incesto (Freud lo había intuido, pero según nosotros no lo ha enfocado correctamente: el sexo no es el fin - como pensaba Freud - sino un simple medio), es NORMAL: queremos volver a nuestros orígenes, como el salmón, por lo tanto a nivel físico nuestros padres son nuestro origen y esto hay que superarlo con el sentido espiritual: volver a tu Dios para averiguar o investigar, o más bien descubriros a VOSOTROS como Dioses: sois vosotros mismos vuestro Dios, si sois capaces de despertar en vosotros este poder innato de autogenerarse, tal como lo hizo posteriormente Urano con Gaia.

TODO SALE DE LA NADA PORQUE LA NADA SE ANULA POR AMOR 

Y PARA DAR A LUZ TODO

La nada es un paradigma mental, de hecho es un sofisma metafísico. Por nada entendemos la inexistencia pero cuando concebimos la nada ya es algo, es una idea por lo tanto existe. Es una semilla y dentro de esa semilla está todo, aun más está el Todo.

El eterno dilema de lo que era en un principio seguirá siendo eterno, precisamente porque pensamos de manera dualista entonces tratamos de entender si fue primero el huevo o la gallina (si hubo un huevo ¿cuál gallina lo hizo? si fue la gallina ¿de qué huevo nació?...etc), ¿qué había antes del principio? otro ¿principio? No es lógico pensar lo que era antes del principio si el tiempo todavía no existía, ¿entiendes que pensamos en el tiempo mientras el tiempo no estaba antes del principio? El pensamiento unitario en cambio no ve el dualismo, Todo es Uno: Urano fecunda a Gaia, la Tierra, mirándola con amor desde lo alto de sus PROFUNDIDADES, derrama sobre ella una lluvia fértil (la semilla) llenando sus surcos, fisuras (la vulva), así fue como Gaia entonces dio a luz hierba, árboles, flores, bestias y pájaros, lagos y mares, pero esta lluvia vino de la condensación amorosa de las aguas de la Tierra. En la Biblia hablamos de agua arriba y agua abajo, ese es el ciclo de la vida, de la lluvia. El cielo sobre la tierra, como el hombre sobre la mujer, se describe en la Biblia de una manera muy dulce: un espíritu flotaba (como la gallina sobre sus huevos) sobre las aguas del abismo. De hecho, Urano es el aire, el espíritu que fecunda, como el Espíritu Santo para los cristianos que da gracia y vida al alma. El Cielo y la Tierra están dentro de nosotros, lo que nos hace humanos es nuestra conciencia divina, Todo yace dentro de nosotros, así como dentro de una semilla yace todo un árbol con sus flores y frutos. 

GAIA DIO A LUZ A URANO

Gaia o Gea es, en la religión y mitología griega, la diosa primordial, por lo tanto el poder divino de la Tierra. El hombre primordial del que proceden todas las cosas es el fruto de la tierra por lo tanto Urano, el cielo. ATENCIÓN: es la tierra la que genera el cielo y no al revés como enseñan las religiones fútiles. Nosotros (la tierra) generamos la idea de divinidad y el sentimiento de eternidad (cielo). Incluso en la Biblia, el Edén, el paraíso, no es un lugar celestial, sino un jardín terrenal, en el Genesis el Eden no està en el cielo sino aquí en la Tierra. Así la verdadera espiritualidad ENCARNA (como Cristo) la divinidad en la materia, hace todo divino por lo tanto plenamente humano, la verdadera humanidad es la plena realización de Gaia, de uno mismo. Es el descubrimiento de la divinidad en nosotros, esto es volvernos Humanos no ángeles, no cambias la esencia, la alcanzas. El cielo es nuestra proyección mental, es la semilla de esa energía que no está sujeta a nuestra dimensión material, aunque esté atrapada dentro de nosotros.

EL TÁRTARO, UN INFIERNO CELESTIAL DURMIENTE

Así como Eros hace que Gaia surja del Caos, también el Tártaro surge del Caos. ¿Qué significa? La Conciencia hace surgir de nuestro Ser (Caos) la realidad, la madre Tierra, Gaia, la armonía con uno mismo. En cambio, quien no tiene esta conciencia obviamente del Caos (Ser extrañado o ignorado) da origen al Tártaro, es decir el lugar entendido como la realidad oscura y subterránea, la ignorancia: el Inconsciente a merced de su fuerza destructiva, lo que los cristianos llamarán el infierno. Atención: no es un lugar, es un estado de ánimo interior tanto de la conciencia como de la emoción humana, de la psique. Aquí, como veremos más adelante, yacen encerrados los Titanes, los Cíclopes y los dioses del Olimpo, nuestras mayores potencialidades condenadas por la Ira de Zeus que es el simbolo de nuestra divinidad desaparecida.

ESTAMOS HECHOS DE DUALIDAD Y NOS DESECHAMOS CON EL DUALISMO

La historia continúa: "El Tártaro se extiende sobre el Caos y Gaia sobre el Tártaro, formando la primera estratificación ordenada del cosmos. El universo comienza a tomar forma". Como ves entre Gaia y Caos hay un punto medio, el equilibrio y este es el Tártaro, simbólicamente es la conciencia que surge del Inconsciente una vez que es acogido en la unión de los opuestos (Yin Gaia y Yang Caos). A nivel psicoanalítico estos 3 niveles, dimensiones o capas son el SE (Caos) el Superyó (Tartarus) y el IO (Gaia). A nivel espiritual en el alma estas 3 fuerzas son en nosotros la cabeza (razón) el corazón (sentimiento) y la conciencia que une a ambos (iluminación). Estas triadas se repetirán numerosas veces como las 3 gracias antiguas o el Dios Trinidad: Padre, Hijo, Espíritu Santo; Intelecto, Voluntad e Intuición; Verdad, Bondad y Belleza; Revelador, Revelado y Revelación; Amado, Amante y Amor; observador, Observado y Observación... y así sucesivamente. Todo el ser està construido en este triple modo, porque es la esencia misma del atomo (protón, electrón y neutrón). 

LA OSCURIDAD, ÚTERO DE LUZ

El caos da a luz a dos hermosas criaturas "Erebus" (oscuridad) y su hermana Nyx (Noche). La oscuridad habita en el útero del Tártaro, la Noche habita en el útero de Gaia. Estas dos dimensiones son un símbolo del inconsciente y el subconsciente, ambas condiciones envueltas en la oscuridad, muchas veces tenemos miedo a la oscuridad, precisamente porque somos inconscientes de nuestra conciencia y es de hecho que el CONOCIMIENTO nace de la Conciencia. Atención a como continua el mito: De Erebus y Nyx (es decir de la oscuridad y la noche) nace Eter (el Ser puro) y Hemera (la Luz del día), y van a morar sobre Gea. Noten como la luz nace de la oscuridad, como el día nace de la noche. Esta Luz es la verdad y este día la conciencia. Sólo quien sepa descender a las tinieblas del inconsciente humano, de su infierno, del tártaro, podrá llevar a la Luz con amor a estas resplandecientes criaturas: Éter y Hemera. 

Urano se convertirá en la morada de Éter (El cielo, la morada del espíritu), mientras que Gaia seguirá siendo la morada de Hemera (la Naturaleza, la morada de la conciencia).

Es maravilloso seguir el orden en que los mitos griegos describen el nacimiento de las cosas o la realidad, que no son más que nuestras dimensiones internas.

GAIA SE ABURRE DE URANO

Urano no hizo más que hijos, sexo, la locura del varón que solo ve placer en la mujer, del patrón que solo ve ingresos en el trabajador, del gobierno que solo ve poder en el pueblo. Gaia, cansada de esta fecundidad, pidió a sus hijos que la protegieran de su deseo de procrear. La mujer se harta del hombre si se reduce a una máquina de placer y de hijos (lo mismo le ocurrirá a Urano que se harta de sus hijos, como veremos más adelante por diferentes motivos), pero a nivel espiritual y psicológico El significado es igualmente importante: nuestra naturaleza interior (lo femenino) se cansa de tener que ser sólo en función de la materia, la apariencia, la belleza externa, cuando servimos a un falso Dios o ideal (Urano, un cielo vacío) nos sentimos esclavos, manipulados. Los hijos de Gaia son las artes o pasiones, que pueden volverse buenas o malas, según su orientación, al igual que las ideas y las pasiones en nosotros.

LA HOZ MORTAL DE CRONO

Urano estaba preocupado por la idea de que sus hijos pudieran despojarlo del dominio del universo, es el miedo típico de los poderosos hacia las personas, sus hijos, que podrían usurparles el trono, es el miedo de los padres autoritarios de perder su poder sobre los niños; Urano es el señor déspota, no ama a sus hijos, los considera obstáculos monstruosos, obsesionado por este miedo, comenzó a hundirlos en el tartaro, hasta el centro de la tierra (son los traumas, pulsiones inconscientes). A nivel espiritual es el predominio de la materia sobre los frutos interiores, un sinfín de experiencias sin finalidad ni enseñanza. Gea, triste y enfadada por el destino que su marido tenía para sus hijos, decidió reaccionar. De ahí la revuelta interior, la crisis, la depresión, el aburrimiento mortal. Sin que Urano lo supiera, construyó una hoz con hierro extraído de sus entrañas (este estado de animo se llama crisis, crisis significa estar en el filo de la cuchilla, entre el martillo y el yunque, momento decisivo, es dar un corte) y reunió a sus hijos, pidió a todos que se rebelaran contra su padre para castigar su ferocidad. Solo uno, el más joven y último de los titanes, se atrevió a seguir el consejo de su madre: Cronos, quien, armado por su madre, se escondió en la tierra y esperó la llegada de su padre (el fracasado). La madre (es el alma) herida, usada y despreciada (el inconsciente) siempre anima y motiva al hijo menor (la rebelión en nosotros, el arquetipo de la juventud) Cronos, el único que quiere cortar la ley, la formalidad, el pasado. Crono quería castrar a su padre, este es un simbolo: quitarle el poder (el pene es simbolo de poder masculino). Pero es bien sabido que la maldición del Padre cae sobre su hijo (nosotros nos llevamos encima los trauma d elos padre), así también Urano pronunció la profecía que caería sobre su hijo: "No te regocijes, lo que me has hecho, tu hijo te lo hará a ti", lo que quiere decir que todos los dioses y hombres varones, para realizarse como tales, deben pasar por la experiencia de la castración. No nos extrañamos si al final repetimos los mismos errores de nuestros padres y sin querer y sin darnos cuenta nos convertimos en lo que odiamos de ellos.

DIOS PERDONA, LA NATURALEZA NO PERDONA

Fue Gèa, la tierra Gaia, tal como nos cuenta el mito, quien se rebeló contra Urano, el Cielo primordial. Urano copulando continuamente y con fuerza sobre ella, aplastándola y empujando a los niños por nacer de vuelta a su vientre (el vientre de la tierra se vuelve un Hades, un infierno, un mundo subterráneo sin vida) . Esta imagen tiene también una implicación sociológica simbólica: Urano representa a los gobernantes, políticos y religiosos, que prometen sólo el cielo y el bienestar, pero explotando la tierra, reduciéndola a la esclavitud moral y psíquica, a la dependencia material del consumo, todos los humanos que se hunden en el Tartaro del capitalismo, del falso comunismo donde no existe la fraternidad, de la apariencia y del inexistente bienestar social; la tierra como naturaleza debe rebelarse tarde o temprano: los terremotos, el aire contaminado, los campos infértiles, las enfermedades, los virus, las epidemias son como las mortíferas hoces de Cronos que tratan de emascular y castrar el poder avasallador de Urano.

CASTRAR EL EGO

En la mitología griega encontramos varios casos en los que el hijo castra al padre: Cronos a Urano y luego Zeus a su vez a Cronos. Era una imagen simbólica que representaba el paso del poder: el pene en el hombre es simbolo de poder, cortarlo significa dejarlo impotente. Como ya no puede reproducirse, su ciclo termina. Crono es el tiempo, este tarde o temprano nos vuelve impotentes, nos lleva a la muerte, nos muestra que al final todo es inútil y vano en la materia, ante la muerte sólo queda el espíritu; hoy vivimos en una era donde la hoz de Cronos nos castra todos los días a cada minuto, vivimos sin tiempo, nos hace impotentes porque no tenemos tiempo para dedicarnos a todo lo que queremos en la naturaleza: Urano ya no puede aparearse con Gaia . "De hecho, era costumbre de Urano, descender la noche del cielo para abrazar a su novia en la oscuridad. Tan pronto como Urano se presentó, Cronos saltó y con una mano inmovilizó a su padre mientras con la otra lo emasculaba con una hoz y un golpe cercenaron la virilidad de su padre y arrojó al mar su miembro". La emasculación de Cronos es indispensable para el alma, es necesaria para la vida de Gaia: encontrar tiempo para sí misma, para dedicarse a sí misma, para no tener que vivir bajo el yugo de Urano (de los placeres terrenales, de las tareas del hogar, de la materialidad) . En el ámbito religioso esta castración la hacen por ejemplo sacerdotes, monjes, algunos gurús, con la castidad, pero cuando es obligatoria puede ser forzada y por tanto no fructífera, porque no se hace en el momento oportuno, sin la hoz de Gaia, es decir, es la naturaleza la que opcionalmente nos lleva a este desapego, no una ley, no una imposición. En el ámbito religioso muchos se vuelven castos por imposición sin estar preparados, en este caso Cronos corta el falo paterno pero sin la ayuda de la hoz materna de la que el miembro no cae al MAR, que es otro útero y, como veremos, no dará fruto: el amor, porque Afrodita nacerá del miembro arrojado al mar. Recordemos que la hoz era una herramienta agrícola utilizada para la siega que tiene lugar cuando el trigo está listo, cortamos energía sólo cuando somos humildes, nos volvemos castos sólo cuando somos conscientes de poder amarnos, de lo contrario cosechamos en vano, nos castramos sin necesidad, sacrificios vanos como los que hacen tantos religiosos. 

EL AMOR NACE DE LA MUERTE DEL EGO

Si Cronos representa el tiempo que el alma (Gaia) se dedica a sí misma y para hacerlo inevitablemente tuvo que dejar de lado a Urano (la materialidad engorrosa), la emasculación que Cronos le hizo a su padre Urano nada tiene que ver con la emasculación concreta (no es genital, es psicologica), nada que ver con el corte real del pene, pero significa la materialidad de nuestros gestos desprovistos de conciencia: la gente sin espiritualidad es castrada interiormente. Es el poder que dedicamos estérilmente sólo a la materia, a las cosas fútiles desprovistas de espíritu (de amor). De hecho, el pene o el falo de Urano (símbolo del poder de la materia) es arrojado al mar, símbolo de lo inmenso, es cuando nuestra alma se sumerge en su dimensión trascendental, las profundidades marinas de la conciencia; cuenta el mito que el falo al entrar en contacto con el mar hizo brotar una espuma, algo parecido al semen, una eyaculación cósmica (falo=razón que se une al mar=útero o trascendencia), no es una muerte de la materia sino que es un nacimiento del espíritu y de hecho la historia dice que de esa espuma salió Afrodita es decir Amor. Si no dejamos de lado nuestro Ego (falo de Urano) y, además de eso, lo unimos a una dimensión espiritual (el Mar de Gaia) el amor no nace, de hecho la espuma la da sólo el dispersión de un gas dentro de otra materia. No se desprecia la materia (el falo no se tira sino en el Mar, en la conciencia, el falo no muere sino que se trasforma), sino no hay paz en uno mismo, no hay equilibrio, no hay espuma y sin espuma no existe Afrodita, y sin ella no hay amor en nuestras obras y trabajos.

EL NACIMIENTO DE LAS ERINIAS O FURIAS

Hemos visto cómo nació Afrodita, del falo de Urano (poder) emasculado por Cronos (Tiempo) es decir “tener tiempo para uno mismo es un poder”, porque así nace el amor, dedicándonos a nosotros mismos; cuando perdemos el tiempo nos volvemos impotentes, Urano se apodera de nosotros, nos empuja a vivir en el Tártaro (en la futilidad e inconsciente). En cambio la sangre, dice el mito, cayó al suelo, sobre Gaia, no se lava, no hay iniciación (no hay agua, que es bautismo) y al impregnarse la sangre (por lo tanto el dolor) sobre la tierra (nuestra humanidad) dio lugar a las Erinias o las furias como las conocían los romanos. Estas son: Tesifone (la vengadora o la envidia), Megera (la celosa o el odio), Aletto (la implacable, perturbación o sentimiento de culpa). No es casualidad que sean 3, porque 3 son las dimensiones del ego y como amor fallido o perdido (sangre derramada en el suelo significa no enterrada, por lo tanto venganza, símbolo de problemas no resueltos), por lo tanto afecta nuestras 3 heridas del ego: orgullo (del Padre), egoísmo (del Hijo) y soberbia (del Espíritu). Fíjate en las personas fallidas, las personas que no pueden superar sus traumas, que no perdonan, que viven sepultadas en su pasado:

Son orgullosos, no admiten el error en el que están, en las manos de Tesifone, creen que están castigando a otros, en cambio no ven que se lastiman solo a sí mismos. 

Son egoístas, cerrados en sí mismos, incluso mentalmente, por lo que sin aire interior se envenenan, se vuelven ácidos, podridos, son presa de Megera, creen que odian a todo y a todos, pero en realidad son incapaces de amarse a sí mismos.

Son soberbios, nadie es digno de ellos, pero están moralmente en el suelo, están en las garras de Aletto, por lo que el sentimiento de culpa los perturba, pero al no verlo, perturban al mundo entero al culpar a otros por la culpa que es solo de ellos mismos.

LA SOMBRA DE UN DIOS AUSENTE

El mito dice que Urano logró escapar muy lejos y desde entonces nunca más se acercó a la tierra, su amada. Esto tiene un gran significado: la experiencia de la castración es la aceptación de nuestros límites, es por tanto el paso de la juventud omnipotente al silencio del adulto. Cuando os hacéis Padres en vuestra alma ya no lucháis por la supremacía, ya no queréis el dominio sobre vuestros hijos y menos la conquista del mundo. El sabio asume esta parsimonia, se hace a un lado, este casi insignificante apartamiento se adentra en un vacío donde no se le encuentra ni se le ve. Aquí está el abandono de los dioses, es la renuncia a nuestra falsa divinidad. Abandonar la competencia, la comparación, el afán de superación y el poder son cualidades de quien ha alcanzado la divinidad y, como Urano, para tenerla basta con renunciar a ella, asumir la impotencia o la castración psíquica, sólo así, paradójicamente, se le concede al hombre "superar" a los dioses.