Animales Simbolicos

 

UNICORNO, EL FALSO MITO
Figura mitológica, como el Dragón, de dudosa existencia, a pesar de los falsos hallazgos y algunas evidencias arqueológicas de esqueletos manipulados deliberadamente para probar su existencia en la antigüedad.
Hoy en día, el unicornio es visto como el símbolo universal de pureza, pero durante los primeros años de su "leyenda" se los veía como criaturas sedientas de sangre. El primer relato escrito del unicornio proviene del texto "Indica", del médico griego Ctesias de Cnidus, donde describió bestias en la India (en 398 a.C) del tamaño de caballos con un cuerno en la frente. Pero sabemos bien que en ese momento habian 3 animales con la característica del cuerno en la cabeza: el rinoceronte, el onagro (o asno salvaje), conocido en la Antigüedad por su rapidez y su combatividad, y el antílope tibetano. De hecho, en el siglo I d.C., afirmando citar a Ctesias, el naturalista romano Plinio escribió que el unicornio era el animal más feroz de la India, con el cuerpo de un caballo, la cabeza de un ciervo, las patas de un elefante, la cola de un salvaje jabalí y con un cuerno que sobresale de la frente. Plinio también argumentó que capturar al animal vivo era imposible, una característica que se volvió significativa para la gente de la Edad Media (por lo que ciertamente estaba hablando de un rinoceronte). Un poco más tarde, un siglo después, el erudito romano del siglo II d.C. Claudio Eliano escribió un libro sobre animales basado en Plinio. Eliano escribió que un unicornio, durante la época de apareamiento, se comporta de una manera extremadamente amable con la hembra. Esta descripción de la criatura se convirtió en otro rasgo altamente simbólico para los autores y artistas de la Edad Media, de ahí la leyenda de que la bestia solo podía ser capturada por una virgen. Si la doncella no llegase a ser virgen, Bartolomeo Ánglico precisa que el unicornio la matará por «corrupta e impura». En el siglo III, el unicornio también se apoderó de los textos religiosos y se asoció con la alegoría proporcionada en el Physiologus, una colección de cuentos de bestias de la Edad Media, que identificaba al caballo de un cuerno con Cristo. Esta tendencia cambió por completo el punto de vista sobre el animal, ya no descrito como "sanguinario", sino puro y puro que solo pueden ver las vírgenes. Una creencia en cierto sentido "viva" todavía hoy, ya que el unicornio está asociado con la dulzura y es principalmente un símbolo asociado con los más pequeños. Fue utilizado durante siglos como figura de escudos, heraldos, de las grandes y únicas familias, sellos, monedas, etc.

Pero el mayor error donde se apoderó la creencia del unicornio fue en la traducción bíblica de la Vulgata donde en el Salmo 21:22 dice "Sálvame de la boca del león, y líbrame de los cuernos de los unicornios", porque mientras en el hebreo original se usa la palabra "reʼém" enorme bovino con cuernos, esto fue traducido al griego en la Biblia Septuaginta con el término "monókeros" es decir rinoceronte y luego pasó al latín como unicornium (asì es que nacen los chisme !!!). Hoy el unicornio es una figura de cuento de hadas muy importante, se encuentra en muchas historias: Harry Potter, My Little Pony, Alicia en el país de las maravillas y muchas otras. Dejo para otro post mi interpretación simbólica psicoanalítica.

EL UNICORNO, SIMBOLOGIA 

En el simbolismo medieval, el unicornio se describía como un animal pequeño (para representar la humildad) pero invencible. De apariencia similar a un caballo blanco, un símbolo de nobleza y pureza, estaba provisto de un solo cuerno largo en el medio de la frente para simbolizar la penetración o comprensiòn de lo divino en la criatura. Ahora conectemos los símbolos: la cabeza es la sede del pensamiento, el cuerno que sale de allì es la fuerza, es una manifestación de este poder, de hecho recordamos que en la Basílica de San Pietro in Vincoli, en Roma, se encuentra la tumba de El Papa Julio II, el Papa 216º de la Iglesia Católica, conocido como "el Papa guerrero" o "el Papa terrible", que se adjudica la fundación de los Museos Vaticanos. El mausoleo fue obra de Miguel Ángel donde se encontró la famosa estatua de Moisés con cuernos. ¿Porque Moisès tenìa cuernos como si fuera un diablo? Al diseñar la escultura, Miguel Ángel se basó en la "Vulgata", la traducción latina de la Biblia de la antigua versión griega y hebrea realizada por San Jerónimo, entre finales del siglo IV y principios del siglo V. En el texto, Jerónimo narra que, después de cuarenta días delante de la presencia de Dios, Moisés descendió del Sinaí y regresó a su pueblo con cuernos en la cabeza. Las palabras "Karan" (rayos) y "Keren" (cuernos) en la Biblia hebrea consisten únicamente en las consonantes KRN. En este caso, es el lector quien debe interpretar el significado correcto. San Jerónimo, pensando que solo Cristo podía brillar con luz, se equivocó al traducir el término y decidió describir a Moisés con dos cuernos en la cabeza. Entonces Miguel Ángel en lugar de una cabeza llena rayos de luz, brillando con sabiduría adquirida, le hizo los cuernos. Este es el sentido del cuerno: iluminaciòn interior, lo mismo también para el unicornio: el tercer ojo brilla tanto con conocimiento y luz que sale y se convierte en un cuerno poderoso en la frente. De hecho, el cuerno está esculpido con una onda en espiral (recuerden que eran cuernos de un cetáceo, el Narval, que se hicieron pasar falsamente como cuernos de unicornio y tuvieron un grande comercio en la Edad Media), sin embargo, sigue siendo el símbolo de las ondas cerebrales como manifestación de la luz que llega de nuestra glándula pineal, las ondas helicoidales que forman el cuerno del Naval son las dos vibraciònes opuestas (yin y Yang) que se cruzan y se tejen como en nuestro ADN, son simbolo del conocimiento trascendental y divino que penetra cada cosa.

¿BÚHO O LECHUZA?

La mayoría de la gente no sabe la diferencia entre búho y lechuza, pero es simple: el búho es más grande, su envergadura alcanza los 100 cm que el búho a los 60 cm. Luego, el búho tiene mechones de plumas característicos en las orejas mientras que la lechuza no lo es y por último los ojos del búho son redondos y los de la lechuza son discos oblicuos.

Son animales nocturnos por tanto ven en la oscuridad, son símbolo de la sabiduría (es el simbolo de los ermitaños), de saber mirar las cosas ocultas incluso la muerte, por eso también tenían un aspecto negativo en la antigüedad y se les veía como pájaros de mal agüero. La lechuza se llamaba, en la antigüedad, "el bùho de Ateneas". Nombre que ha contribuido a la confusión entre estos dos pájaros. El búho es un símbolo del conocimiento y de la cultura. De hecho, en la antigüedad griega se atribuyó a la diosa Atenea, la diosa de la sabiduría y del conocimiento. Su capacidad de mimetizarse lo convierte en un símbolo de prudencia y adaptabilidad.

EL DRAGÓN

Animal legendario que, a pesar de su origen fantástico, está profundamente arraigado en la psique colectiva, y por ello aparece con frecuencia en los sueños del hombre moderno y civilizado. Rico y complejo en su simbología porque es reptiliano como una serpiente, alado como un águila, poderoso cuadrúpedo como un dinosaurio y además escupe fuego, el elemento incontrolable por excelencia. Todo esto convierte al dragón en el contenido del inconsciente más renegado y poderoso con el que enfrentarse para conquistar la propia energía inconsciente, para utilizarla sin ser esclavizado por ella. Guardián de cuevas y tesoros, por lo tanto, un obstáculo para el héroe que deberá alcanzar su madurez final. Tanto Jung como Freud reconocen en el dragón la peculiaridad del arquetipo materno con el que el individuo deberá luchar para sentir y expresar su carga libidinal y su sexualidad. La victoria sobre el dragón es el triunfo del ego sobre las fuerzas regresivas del inconsciente lo que redundará en la capacidad de enfrentar y superar los dramas y cambios que presenta la vida. En Oriente, por tanto, el Dragón se ve en su aspecto positivo: un movimiento de sabiduría, de búsqueda de la superación de la grandeza; en occidente (lamentablemente) fue visto en un sentido negativo: fuerza maligna, satánica y destructiva. En realidad es tanto bueno como malo, depende entonces de nosotros saber hacer uso de esta fuerza instintiva e inconsciente para bien o para mal. De hecho, la saga Dragon Trainer o el dragón hecho amigo del cuento de Shrek, o los dragones prodigiosos del mundo de Juego de Tronos, nos confirman esa doble dimensión dual del dragón que podemos y debemos atesorar.

“Alimentad el alma porque el hambre la transforma en una bestia que devora cosas que no tolera y de las que queda envenenada. Amigos míos, es sabio alimentar el alma, para no levantar dragones y demonios en su seno”. (Carl Gustav Jung)